transmitidos por vectores Anaplasma sp
Ehrlichia sp., Babesia sp., Theileria sp.,
Trypanosoma sp. y Rickettsia sp. se analizaron
por PCR, seguida de secuenciación. Los
metabolitos de plaguicidas se analizaron
utilizando cromatografía líquida de alta
resolución acoplada a espectrómetros de masas
con tándem cuadrupolo como detectores. Se
establecieron redes de colaboración
interinstitucional para el diagnóstico de
Leptospira spp., hantavirus, herpesvirus,
coronavirus, rabia, Sarcocystis spp., y diferentes
micosis.
Resultados
Se recorrieron en total 1.939,45 km, abarcando
rutas nacionales, provinciales y caminos internos
de las áreas protegidas. En estas recorridas, se
muestrearon 15 mamíferos muertos dentro de los
PN (10 Hydrochoerus hydrochaeris, 1
Blastocerus dichotomus, 2 Cerdocyon thous, 1
Scapteromys aquaticus y 1 Leopardus geoffroyi)
y 25 en las áreas de interfaz (10 H. hydrochaeris,
1 Lutreolina crassicaudata, 1 Axis axis, 5 C.
thous, 3 Lycalopex gymnocercus y 5 zorros no
identificados). Además, a través de la
notificación de casos por parte de la comunidad
y el personal de la APN, se muestrearon 34
individuos dentro de los PN (5 B. dichotomus, 3
C. thous, 2 L. gymnocercus, 1 L. geoffroyi, 2
Didelphis albiventris, 1 Oligoryzomys sp., 4
Oxymycterus rufus, 5 S. aquaticus, 6 Akodon
azarae, 1 Lontra longicaudis, 1 Tadarida
brasiliensis y 3 H. hydrochaeris) y 45 en áreas
circundantes (31 B. dichotomus, 3 C. thous, 1 L.
gymnocercus, 3 Chrysocyon brachyurus, 1 L.
geoffroyi, 1 Lepus europaeus, 1 L. longicaudis y
4 H. hydrochaeris). Se llevaron a cabo 4 talleres
y 8 charlas, tanto virtuales como presenciales. La
aplicación móvil "Marandu" fue presentada en el
PNCP y en 8 puntos de la provincia de Corrientes
y Buenos Aires. En el contexto de la vigilancia
sistematizada, se llevaron adelante campañas
estacionales (primavera-verano y otoño-
invierno) durante tres años en el PNIB y PNCP,
se muestrearon 406 roedores y 279 murciélagos.
Se colectaron 450 garrapatas, 179 tábanos y un
set de 263 muestras ambientales. Se detectó
Trypanosoma sp., T. evansi, T. theileri,
Anaplasma marginale y Theileria cervi. A través
de la red de colaboración interinstitucional se
detectó hantavirus en roedores del PNIB
9
,
Microascus sp. y Cephalotheca sp. en
murciélagos de PNIB y PNCP
10
. Se identificó la
presencia de Acetamiprid, Imidacloprid,
Atrazina, Metolaclor, Tebuconazol,
Difenconazol, Metconazol, Clorpirifos,
Cipermetrina, Butóxido de Piperonilo, Fipronil,
2,4 D, Glifosato, AMPA y Glufosinato de
amonio en muestras ambientales con diversas
concentraciones. Asimismo, se encontraron
restos de Imidacloprid, Tebuconazol,
Metolaclor, Fipronil, Clorpirifos, Cipermetrina,
Butóxido de Piperonilo y Atrazina en tejidos de
B. dichotomus. Los resultados de la vigilancia de
salud en fauna en PN y sus áreas de interfaz
destacan la importancia de estrategias integradas
y sistemáticas para el monitoreo sanitario. El
66.39% de las notificaciones provinieron del
personal de áreas protegidas y la comunidad
local, lo que demuestra la efectividad de redes
participativas y la utilidad de la ciencia
ciudadana en la detección temprana de eventos
de morbi-mortalidad. Los talleres de
capacitación y la aplicación "Marandu"
facilitaron la participación comunitaria,
fortaleciendo la relación entre la investigación
científica y la gestión de la conservación, y
promoviendo mayor conciencia sobre
biodiversidad y salud ecosistémica. Las redes
interinstitucionales optimizaron los diagnósticos
de laboratorio y el uso de recursos. La detección
de patógenos zoonóticos resalta la necesidad de
un monitoreo continuo de reservorios silvestres
en áreas de interfaz. La presencia de plaguicidas
en la ambiente evidencia la contaminación
química y los riesgos asociados para la salud y el
equilibrio de los ecosistemas, subrayando la
urgencia de políticas ambientales sostenibles que
mitiguen estos riesgos y preserven la
biodiversidad.
Conclusión
La vigilancia de salud en fauna silvestre es
fundamental para comprender, prevenir y
controlar los ciclos de enfermedades y los
escenarios de contaminación asociados. Los
enfoques multidisciplinarios, que incluyen la
participación activa de la comunidad, son
esenciales para el éxito de estas estrategias bajo
el enfoque de "Una Salud". Se requiere continuar
con la implementación de estas prácticas para
abordar los desafíos futuros relacionados con la
salud de la fauna y su interrelación con la salud
humana y ambiental.
Bibliografía
1. Daszak P, Amuasi J, das Neves CG,
Hayman D, Kuiken T, Roche B, et al.
Workshop report on biodiversity and
pandemics of the Intergovernmental
Platform on Biodiversity and
Ecosystem Services. IPBES; 2020.