que sea única la localización intraoral
1-3
.
Se ha
estimado una prevalencia en la población general
entre 0,5% a 3%; con una proporción de hombres
y mujeres de 1:2,5. El LPO puede presentarse en
cualquier etapa de la vida, siendo más frecuente en
mujeres entre la cuarta y séptima década
4
. La
importancia de su conocimiento radica en que el
LPO es capaz de malignizar, siendo considerado
como un trastorno o desorden potencialmente
maligno. Las formas clínicas de presentación de
esta entidad han sido estudiadas en la bibliografía,
destacando las variedades papular, reticular,
atrófica, ampollar, erosiva y en placa
5
.
La variante reticular es la más frecuente
apareciendo como una lesión blanca, lineal en
forma estrellada, reticular o anular ligeramente
sobreelevada, palpable denominadas estrías de
Wickham y que no se desprenden al raspado. Se
presenta generalmente en zonas de la mucosa
yugal de manera bilateral, simétrica y
asintomática
6-7
.
La variante atrófica-erosiva se caracteriza por un
adelgazamiento del espesor del epitelio,
manifestándose por un enrojecimiento
generalizado y difuso exponiéndose los vasos
sanguíneos subyacentes del corion. La localización
más frecuente es la lengua, siendo también la encía
un lugar habitual de asentamiento presentándose
como una gingivitis descamativa crónica. Esta
forma se caracteriza por la presencia de
ulceraciones del epitelio sobre una mucosa
atrófica, aunque también podría presentarse de
forma ampollar
8
.
No se ve diferencia en el mecanismo patogénico
entre el LPO reticular y el atrófico-erosivo, aunque
histológicamente sí ya que se observa a nivel del
corion diferencia en la densidad del infiltrado
inflamatorio siendo mayor en los atrófico erosivos
que en los reticulares
9-10
.
El diagnóstico del LPO debe basarse en la
observación clínica y confirmarse con la
descripción de las características histopatológicas.
Hay una serie de criterios clínicos e
histopatológicos importantes para confirmar el
diagnóstico de una manera concluyente
11
. El
patrón clínico característico es la presencia de
lesiones bilaterales más o menos simétricas y de
líneas blanquecinas en el patrón reticular o
lesiones atróficas en la variante atrófico-erosivo.
Los criterios histopatológicos son la presencia de
una banda bien definida de infiltrado inflamatorio
compuesta principalmente por linfocitos, la
degeneración hidrópica de la capa basal y la
ausencia de displasia. Una hiperqueratosis, que se
define como un aumento de espesor de la capa
córnea, una acantosis o aumento del número de
capas de células granulares donde las papilas se
disponen a modo de dientes de sierra. La lesión
más significativa del LPO es la degeneración
hidrópica del estrato basal que es la degeneración
de los queratinocitos basales y está relacionada con
la patogenicidad de la enfermedad. Aparecen los
cuerpos de Civatte que son estructuras eosinófílas,
redondeadas o lobuladas que a veces contienen
núcleos picnóticos o fragmentos nucleares
localizados principalmente en la capa basal. Serían
los queratinocitos basales que han sufrido necrosis
prematura por la degeneración hidrópica de las
células basales
12-13-14-15
.
En la inspección clínica hay que ver su
localización, siendo la más frecuente dentro de la
cavidad bucal la mucosa yugal, lengua y encía,
aunque también puede encontrarse en la mucosa
labial, piso de boca, comisura labial y paladar. Al
explorar las manifestaciones cutáneas se deben
observar las áreas flexoras y dentro de ellas la cara
anterior de las muñecas y otras regiones como la
conjuntiva ocular, nariz y laringe
16
. La zona a
biopsiar debe ser un área no ulcerada donde se
conserve el epitelio y de ser posible que existan
estrías
17
.
Respecto a los factores psicológicos en los que la
mayoría de los autores están de acuerdo ya que
juegan un importante papel en la evolución del
LPO, se ha relacionado el estado de ánimo con la
situación inmunológica y los niveles de cortisol
especulándose sobre la posibilidad de que una
alteración en el estado de ánimo pueda producir un
impacto sobre el sistema neuroendocrino, que
influiría sobre las subpoblaciones linfocitarias de
los pacientes con LPO. Esta relación se encuentra
más desarrollada en la variante atrófica-erosiva
que en la reticular. Los pacientes con LPO tienen
un mayor índice de ansiedad, sobre todo en las
formas más agresivas de LPO atrófico-erosivo. Por
lo tanto, además de ser un factor de riesgo la
ansiedad también agravaría la lesión
18-19-20
.
Caso clínico
Paciente femenina de 39 años de edad que acudió
a consulta odontológica al Servicio de
Estomatología de la Escuela de Odontología, de la
Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad
Católica de Córdoba por presentar múltiples
lesiones blancas en la cavidad bucal de 1 año de
evolución, con sintomatología de ardor ante
comidas picantes e ingesta de cítricos y stress. Se
automedico con un antimicótico local, nistatina
suspensión oral 100.000 UI/ml durante 15 días, sin
evolución favorable ni cambios clínicos, por lo
cual decidió consultar a un especialista en
Estomatología.
En los antecedentes personales patológicos los
datos de relevancia son hipotiroidismo, la cual esta
medicada con Levotiroxina 150mg. Respecto a los
hábitos paciente fumadora de cigarrillos rubios en